Después de despacharse a diario contra los ricos, la burguesía, los oligarcas o los blancos, hablar de los pobres y embanderarse con el Che Guevara, haciendo gala permanentemente de un resentimiento social y racial exacerbados, la dirigente del indigenismo K Milagro Sala veranea en Punta del Este, reducto de ricos y famosos. El doble discurso, parte del "circo" del Sistema, también deja a la vista la verdadera cara de estos "defensores de los humildes" a quienes les gusta la buena vida, lo que no estaría mal si no fuera acompañada de la hipocresía.
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“¿Qué tiene de malo que una colla vaya al Conrad?”
Carlos Galván
Clarín, 27/01/11.- ¿Cuál es el pecado de que una colla vaya a Punta del Este?. ¿Qué tiene de malo que una colla vaya al Conrad?. Con esas palabras, la dirigente social kirchnerista Milagro Sala justificó su presencia, el viernes pasado, en el exclusivo hotel Conrad, donde presenció junto a su marido y un grupo de amigos un show de Charly García.
“A mí me gusta su música de siempre, si hasta tengo un perrito al que le puse Charly en su honor”, agregó la líder de la organización Tupac Amaru.
De la presencia de la dirigente en Punta del Este se supo por una fotografía que un argentino le hizo en el Conrad y que envió al portal Perfil.com.
Ayer, Milagro Sala continuaba sus vacaciones en Uruguay. “Llegamos hace 8 días y tenemos planeado volver mañana (por hoy) a Argentina”, adelantó anoche a Clarín la dirigente. Viajó, según dijo, con su marido y otros tres amigos de Buenos Aires con los que compartimos los gastos. Además, es falso que mis hijos estén conmigo. Mi hija Claudia está en Brasil, jugando un torneo de handball. Y mi hijo Sergio está en Jujuy”.
La líder de Tupac Amaru también sostuvo que con su marido y sus amigos alquilaron una casa en Maldonado, una pequeña localidad cercana a Punta del Este. Mientras Punta del Este es el lugar que eligen ricos y famosos para veranear, Maldonado tiene un perfil más intelectual con onda. Allí, por ejemplo, tiene su casa el ex secretario de Cultura José “Pepe” Nun.
“Hace bastante tiempo, unos 6 ó 7 años, que vengo de vacaciones a Uruguay. No me avergüenzo de venir a Uruguay, ¿por qué habría de avergonzarme de venir acá?”, se preguntó.
Milagro Sala también explicó que fue “criada” como “de clase media. Entonces no entiendo cuál es el problema de que venga de vacaciones a Uruguay. Parece que aparte de lo de Barreda no hay otras noticias en Argentina”.
La dirigente social, por otro lado, contó que “se rompe trabajando” y que llegó muy agotada a este verano. “Ya en noviembre empecé a dormirme en cualquier lugar de lo cansada que me sentía”, recordó. Y dijo que pudo costear el viaje gracias a que su marido “tiene 4 sueldos” y “una situación importante”.
Sala presenció el recital desde la sexta fila. En ese sector las entradas costaban 123 dólares.
Según la dirigente, en realidad habían pagado 50 dólares por unas entradas para un sector más económico pero cuando llegaron un conocido de su marido los acomodó en un sitio mejor. “Fue la primera vez en mi vida que pude ver un recital de Charly desde tan cerca”, dijo.
Comentario: Ahora podemos entender porque en verano no hay protestas... los piqueteros nacionales y populares están de vacaciones en punta del este.
Para captar mejor la idea, vamos a postularla en lenguaje psicobolche... porque a pesar de los límites y de lo inadecuado de la expresión, después de tantos años de prédica gramsciana en Argentina, se entiende fácil. Sería algo más o menos así: la lucha de la izquierda... es llegar a la derecha.
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